San Juan en perspectiva

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  Quien no esté familiarizado con las fiestas patronales de Ciutadella no realizará la obvia asociación entre la estatua de bronce que adorna, vigilante, el recorrido de Ses Voltes hacia la catedral, y el “dia des be” (día del cordero). Pero si el visitante está mínimamente familiarizado con la iconografía cristiana, seguramente reconozca al tantas veces reproducido Cordero de Dios, sí, el que quita el pecado del mundo, según la liturgia.

  Este animal -tan universalmente reconocido por sus silencios como por su sabrosa carne- se suele representar cargando al hombro una cruz o una bandera, a veces lleva en la cabeza un halo y a veces no, pero en todos los casos es la imagen del Cristo de los evangelios y, muy especialmente, del apocalipsis. ¿Porqué muy especialmente? Pues porque sin tener que ir hasta Roma tenemos aquí todos los ingredientes necesarios para que el señor Dan Brown y su corte de asesores extraigan otro volumen digno de Tom Hanks. ¿Qué ingredientes son esos? Vamos allá:

  Las fiestas de Ciutadella son solsticiales, se celebra al San Juan de verano, el bautista, ese que es representado por el “homo des be”, paseante descalzo que carga a las espaldas un inmaculado cordero blanco que se terminará quedando en premio a su esfuerzo, a imagen del bautista anunciando la llegada del mesías. El San Juan de invierno es el evangelista, autor del apocalipsis y del evangelio de su nombre. Resulta que en el apocalipsis hay un libro cerrado por siete sellos -como siete soles- que nuestro cordero va abriendo y así las cosas van ocurriendo. Resulta que la estatua de nuestro cordero lleva un sello en la frente. Resulta que el cordero del “homo des be” lleva una estrella en la frente. Resulta que los caballos que invaden las plazas en verano llevan a su vez una estrella en la frente. Resulta que el caballo del cura es el único que no lleva estrella en la frente…

  Debo dejar de escribir y buscar una salida, están derribando la puerta de mi estudio y veo hombres de negro rodeando mi edificio. Espero poder seguir con ustedes la semana que viene.

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